El ciclo del pensamiento, emoción y acción

Para comenzar a ir de deprimido a motivado, tenemos que conocer primeramente como lo dijimos en la entrada anterior reconocer un poco  que es la depresión  de este modo tenemos una base desde la cual podemos partir hacia la motivación. Hay una frase muy interesante que dice:

“Siembra un pensamiento y cosecharás un acto;

Siembra un acto; y cosecharás un hábito;

Siembra un hábito y cosecharás un carácter;

Siembra un carácter y cosecharas un destino“.

Charles Reade 

Todo inicia desde nuestros pensamientos, estos se convierten en emociones que se ven reflejadas en acciones. 

Por lo tanto si analizamos bien este ciclo es como el que aparece a continuación 

Como lo indica la figura los pensamientos influyen en las y las emociones en las acciones. Lo importante es tomar este  diagrama de la forma más provechosa para nosotros. Ya que al cambiar nuestros pensamientos podemos cambiar nuestras emociones lo que no llevara a tener resultados diferentes a los que ahora hemos tenido. 

El día de hoy no hemos venido a hablar de cambiar tus pensamientos, sino  simplemente de eliminar esas emociones  de abatimiento que nos dejan sin aliento, sin ganas de hacer cosas, sin ganas de vivir. 

Como dijo el dermatólogo, vayamos al grano, los ciclos tienen que cerrarse, así como el ciclo del agua pasa del cielo a la tierra de la tierra al mar y de allí una vez más al cielo, si en algún momento el agua se estancara o no quisiera avanzar se detendría el ciclo rompiendo el equilibrio de la naturaleza, de la misma manera, los sentimientos las emociones y las acciones tienen que fluir sin estancarse o interrumpirse, de lo contrario estaríamos ocasionando un desequilibrio emocional.

 Esto lo podemos observar cuando estamos deprimidos que no sentimos nada que nuestro centro de la emociones está atascado, lo cual no permite que la energía emocional acumulada fluya, provocando sobrecargas emocionales incontrolables. Este ciclo puede ser limpiado y renovado para lograr una fluidez y así eliminar las cosas podridas de nuestra vida. 

Hasta aquí les dejo la primer parte de este artículo, en la segunda parte trabajaremos con ejercicios que nos ayudarán a facilitar que este ciclo fluya. Muchas gracias y espero sus comentarios.